Denominación de Origen
DENOMINACIÓN DE ORIGEN ALMANSA
La especial climatología de la zona y su altitud hace de los vinos de Almansa unas de las Denominaciones de Origen de nuestro país. Más de doce bodegas que lo componen exportan a los cinco continentes nuestros afamados caldos.
Historia D. O Almansa
La Denominación de Origen Almansa, se fundó en 1966. En aquella época había
un buen número de bodegas que por distintas razones fueron desapareciendo dejando la viticultura de la zona en manos de unas pocas
bodegas y cooperativas. En los últimos se han creado nuevas bodegas que, unidas a las que se han mantenido en la D.O Almansa desde su creación han dado un nuevo auge a esta zona privilegiada para la elaboración de vinos de alta calidad.
La viticultura en la zona se remonta al siglo XVI. Desde entonces no ha cesado el cultivo de la vid y la elaboración de vinos en Almansa. La viticultura de la D.O Almansa está asentada en dos pilares. El pirmero de ellos es el cultivo de la variedad Garnacha Tintorera que ofrece vinos personales y únicos. Y el segundo pilar de la D.O Almansa es la variedad Monastrell, autóctona qeu complementa a la Garnacha Tintorera. Con esta base vitícola se ha conseguido elaborar unos vinos excelentes.
Hoy en día se pueden encontrar entre los productos de nuestras bodegas, tanto vinos varietales como otros más complejos, resultado de la mezcla de diferentes variedades. Actualmente componen lal D.O Almansa doce bodegas, con una producción media anual cercana a los tres millones de bodegas, que han conquistado a los consumidores de muchos países.
La Tierra
Las tierras calizas poco productivas que ofrecen complejidad y mineralidad a los vinos, se alternan con suelos arcillosos que aportan aromas frescos y varietales. La media de altitud sobre el nivel del mar es de 750 metros. El clima continental y los terrenos de una fertilidad baja, con unas precipitaciones que están por debajo de los 350 milímetros anuales, son idóneos para rendimientos bajos, que aseguran una alta calidad del fruto y una gran concentración del color y los aromas del vino.
Variedades
Monastrell: variedad de hollejo grueso, necesita clima continental y sol, taninos dulces y suabes, color rubí intenso. Da vinos de gran calidad con la crianza adecuada.
Garnacha tintorera: pulpa y hollejos negros, alta concentración de color, acidez alta, excelente para dar estructura y para la crianza.
Tempranillo: vinos de calidad, aromáticos, de acidez y graduación media, color rubí, afrutados, se usa para vinos jóvenes y para crianzas.
Garnacha: resistente a la sequí, de menos color que otras variedades, se utiliza para los rosados y tintos. Aporta una gran finuar y aromas.
Merlot: producese vinos deliciosos y finos, frescos, frutos rojos. Muy adecuado para vinos jóvenes y para completar coupajes con otras variedades.
Syrah: produce vinos especiados, sabrosos y de gran color. Produce excelentes rosados.
Cabernet sauvignon: gran cantidad de polifenoles y color, vino de gran calidad, ideal para crianza.
Petit Verdot: ciclo largo. Tardía en madurar, apta para crianza y envejecimiento. Color y polifenoles.
Chardonnay: vinos de gran finura y calidad. Tiene buen grado, acidez y aroma.
Sauvignon Blanc: muy aromática, de acidez alta. Ciclo medio. Vino elegantes, secos y ácidos.
Verdejo: vinos con gran calidad volumen en boca. Aptos para la criaza. Aromáticos y de gran calidad.
Moscatel de grano menudo: gran contenido en azucares, potencial alcohólico elevado. Muy adecuado para vinos dulces.